El Gobierno de Colombia, a través del Ministerio de Salud y Protección Social, adoptó oficialmente la Política integral para la prevención, la reducción de riesgos y daños y la atención del consumo de sustancias psicoactivas 2025–2033, así como el Sistema Nacional de Atención al Consumo de Sustancias Psicoactivas, mediante la Resolución 2100 de 2025. La nueva política consolida un enfoque integral, basado en la evidencia científica, los derechos humanos y la salud pública, y cuenta con el apoyo y asistencia técnica de la Unión Europea a través del Programa de Cooperación entre América Latina, el Caribe y la UE en materia de drogas —COPOLAD III—. No hay que olvidar que la integralidad, la reducción de daños y el enfoque de salud es una prioridad en la Estrategia Europea de Drogas.
La política de Colombia marca un hito en la región al incorporar plenamente la reducción de riesgos y daños como estrategia central. La reducción de daños es un enfoque de salud pública que busca disminuir las consecuencias negativas, tanto físicas como sociales, asociadas a comportamientos como el consumo de drogas, sin exigir la abstinencia. Se enfoca en políticas y prácticas que reducen los daños, como la distribución de material de inyección estéril, la operación de salas de consumo controlado o la entrega de naloxona para revertir sobredosis.
Se busca, además, la atención primaria en salud (APS) y la articulación intersectorial con participación comunitaria. Además, reconoce la diversidad territorial, cultural y social del país, integrando los enfoques de género, diferencial, intercultural e interseccional en la prevención y atención del consumo de sustancias psicoactivas.
El proceso de formulación y adopción de la nueva política contó con acompañamiento técnico de COPOLAD III, a los Ministerios de Justicia y del Derecho y al Ministerio de Salud de Colombia para consolidar este modelo nacional de reducción de daños con una ruta operativa que incluye diagnósticos institucionales, un mecanismo de gobernanza multisectorial –que articula instituciones y sociedad civil–, y 3 planes territoriales de reducción de daños en la zona cafetera (Armenia, Dosquebradas y Pereira).
Taller Interinstucional
Estos instrumentos de política fueron validados en un Taller Intersectorial llevado a cabo el pasado 25/09 con la participación de 65 representantes de entidades de gobierno, cooperación, academia y sociedad civil. así como autoridades de las tres ciudades priorizadas. Los instrumentos de política y los tres planes locales de reducción de daños fueron presentados oficialmente en un encuentro híbrido el pasado 25/11, espacio que contó con la participación de 35 representantes del gobierno nacional y de los gobiernos locales.
“Colombia se consolida como referente regional en la construcción de políticas de drogas centradas en las personas. Este paso refleja una transformación profunda hacia enfoques basados en la salud pública, la evidencia científica y el respeto por los derechos humanos, principios fundamentales de la política de drogas de la UE ”, destacó Borja Díaz, director de COPOLAD III.
Entre los objetivos de la nueva política destacan la detección temprana, el tratamiento integral y la recuperación de las personas con consumo problemático; la reducción de los riesgos y daños asociados al consumo; la inclusión y protección social de las personas que usan drogas; y la transformación del estigma y la discriminación hacia ellas. El Sistema Nacional de Atención propuesto integrará los servicios de atención al consumo de sustancias psicoactivas a la Red Nacional de Salud Mental y promoverá la participación activa de las comunidades en la implementación de las acciones locales. Este Sistema se adoptará a través de un Decreto de ley que se encuentra en proceso de formulación e involucra distintos ministerios.




