Hoy en día se utilizan técnicas cada vez más sofisticadas para ocultar y pasar cocaína de contrabando a Europa. Dichas técnicas incluyen la incorporación de cocaína base o clorhidrato (HCI) a otros materiales (por ejemplo, cera de abeja, plástico, ropa), para luego extraerla en laboratorios especiales (laboratorios de “extracción secundaria”) instalados dentro de las fronteras de la UE.
La ocultación química de la cocaína es el tema central de una reunión de expertos que comienza hoy en Rhenen (Países Bajos), en el marco del programa COPOLAD III. La reunión, organizada conjuntamente por el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (EMCDDA), la policía neerlandesa y el proyecto CHEMTEC, financiado por la UE, reúne a expertos con conocimientos prácticos sobre la forma en que los delincuentes ocultan, extraen y procesan la cocaína. Los participantes representan a países de América Latina y el Caribe (ALC), organismos de la UE y unidades forenses de las fuerzas del orden europeas, estadounidenses y australianas.
Informe de resultados
Los debates también proporcionarán información importante para la cartografía de las capacidades forenses en los países de ALC, actividad que desarrollará el EMCDDA en el marco de su asociación con COPOLAD III. Se distribuirá un informe con los resultados de la reunión entre los participantes y las partes interesadas seleccionadas.
El Informe Europeo sobre Drogas 2023, presentado el 16 de junio, describe la existencia en Europa de una industria bien establecida de producción secundaria de cocaína, con 34 laboratorios de cocaína desmantelados en 2021 (23 en 2020), algunos de ellos a gran escala.